Si bien es un requisito legal, el nivel de compromiso en la planificación y cumplimiento de la actividad preventiva, al igual que en otros sectores industriales, es muy desigual dependiendo de cada empresa.
Esta situación se refleja en los datos de accidentabilidad, que si bien son susceptibles de mejora, podemos observar que en el periodo 2005-2008, la tasa anual de incidencia de accidentes de trabajo en la industria de alimentación y bebidas ha descendido significativamente. Este dato es prácticamente igual al del resto del estado, aunque todavía se sitúa por encima de la media.
Para leer todo el contenido del artículo pinche AQUÍ